Especialista en Geomarketing
Todavía no inicia su adminsitración el nuevo gobierno y ya hay un fuerte debate sobre dónde debe estar el nuevo aeropuerto de la ciudad de México, se ha consultado a especialistas y se hará una consulta tomando en cuenta a la ciudadanía.
El tema tiene varias aristas, en el presente articulo, daremos un análisis desde Tepetlaoxtoc, uno de los municipios más afectados por la construcción del NAIM en Texcoco, debido a que en su territorio existen 60 minas de materiales, la mayoría de ellas, clandestinas generando un verdadero ecocidio, que no sólo afectará al municipio sino a toda la ZMCM.
Visto desde Tepetlaoxtoc, tomando en cuenta su ubicación geográfica y la de los dos posibles aeropuertos: Texcoco y Santa Lucía Zumpango, cualquiera de los dos seguirá perjudicando al municipio, por estar en área de suministro de material. Dicho de otra manera sea en Texcoco o en Santa Lucía, el municipio de Tepetlaoxtoc seguirá sinedo afectado, ya que seguirán sacando material de las minas para la construccción de cualquiera de los dos aeropuertos.
Tal vez Atenco y Texcoco, vean mitigados sus afectaciones, por la construcción del NAIM en Zumpango, pero sería muy ingenuo creer que las afectaciones terminarían.
El daño ecológico en los municipios cercanos a Texcoco, ya está hecho y en buena medida irreversible. En Tepetlaoxtoc varios de los cerros de la Sierra de Patlachique se han visto afectados considerablemente, no sólo en el aspecto ecológico, sino en el cultural. Se han afectado sitios arqueológicos como los que se encuentran en el cerro de Techachal en Tepetlaoxtoc y en el basurero de residuos tóxicos, en Tlaminca, que está en el radio de la zona arqueológica de Texcutzingo, mejor conocida como los baños de Nezahualcoyotl. Por eso es importante que el INAH se ponga a trabajar y a cuidar el patrimonio cultural, ya que todo este tiempo ha caido en omisión.
Ante este panorama, se debe construir una propuesta alternativa que favorezca a los implicados. Se deb realizar cumpliendo con las normas.
Es preciso analizar el contexto y la profundidad del tema, en primer lugar un hecho indiscutible e irrefutable es que la economía de la globalización es una realidad, por lo que se deben generar estrategias para que afecte lo menos posible a lo local y ver la manera de aprovechar sus ventajas conociendo y aplicando sus reglas. Un ejemplo claro lo tenemos con Corea del Sur, país que se ha sabido subir a la nueva economía aprovechando el comercio exterior, las exportaciones, los servicios, el transporte, la deslocalización impulsando la educación y la tecnología, pero a su vez ha defendido su cultura, identidad y sus empresas con una política nacionalista. Una estrategia para adaptarse y triunfar en la globalización se conoce como SOLOMO, social, local y móvil, para fortalecer la economía y cultura local aprovechandos las TIC y el transporte.
En la nueva economía, el transporte por avión y los aeropuertos juegan un papel clave, al convertirse en el corazón de las principales localidades a nivel mundial, que podemos llamar polos de desarrollo. Cómo se puede explicar que Andrés Manuel López Obrador diga que se construirán a capa y espada la refinería en Tabasco y el Tren Maya en el Sureste y al aeropuerto del centro de México le haya dado vueltas desde hace muchos años.
La respuesta más que técnica es política, para Obrador que gobernó la ciudad de México es inconcebible que el actual aeropuerto deje de funcionar y que se vaya fuera de la ciudad. Donde esté el aeropuerto se constituirá un polo de desarrollo de gran trascendencia en el mundo de la globalización. En esta economía, la geografía se conforma por redes, arcos y nodos, por donde circulan flujos de dinero, capital, poder, información, servicios, productos, personas; los aeropuertos juegan un papel estratégico.
Los aeropuerto más importantes del mundo se localizan en las principales ciudades de peso demográfico, de funcionalidad económica y de conectividad para el procesamiento de información. El aeropuerto en Texcoco provocaría que el peso de los transportes y todos los demás servicios relacionados se volcarían hacia el Oriente del Estado de México.
De seguir la construcción del NAIM en Texcoco, provocará que la región conocida como Acolhuacan, se verá afectada, como de hecho ya lo está en varios ámbitos, pero una vez funcionando se tendrá que constituir en el centro logístico más importante del país en su relación con el mundo y la economía globalizada.
Sería injusto que la región Texcoco sólo viera afectaciones irreversible y que no pudiera gozar de los beneficios del aeropuerto al llevarselo a otro lugar.
La propuesta de Santa Lucía y ahora la idea de volver a poscionar aeropuertos cercanos a la ciudad de México como Toluca o Querétaro, lo único que buscan es alargar el tiempo de vida del antiguo aeropuerto de la ciudad. Es una solución parcial sólo para pasar el sexenio, pero en poco tiempo otra vez se volvería a la polémica de construir un aeropuerto que responda a los flujos de la globalización. Para conectar a Santa Lucía con la ciudad de Mexico se dbería construir una vía de comunicación, porue la autopista México - Pachuca ya está saturada. No hay que perder de vista que la gente que toma un avión busca aumentar la velocidad para llegar a un lugar, por lo que un aeropuerto lejano de la ciudad de México y sin las conexiones correspondientes es inútil, por ejemplo: si el avión hace media hora de vuelo, pero la gente va a tener que pasar un recorrido de dos hora entre el aeropuerto y su lugar destino, entonces convendría hacer todo el viaje por transporte terrestre. Por eso las opciones de Toluca y Querétaro tampoco son viables desde un punto de vista pragmático. El tiempo es el recurso más valioso en la nueva economía.
La propuesta más viable es que se construya el aeropuerto en Texcoco, debido a los avances que lleva, de no hacerlo México quedaría con una muy mala imagen ante la inversión extranjera por la falta de seriedad en proyectos tan importantes como el NAIM, el tren México - Toluca o el tren México - Querétaro. Los empresarios extranjeros verían que no hay un ámbiente propicio y seguro para la inversión.
El aeropuerto se debe seguir construyendo en Texcoco, pero se debe hacer a un lado la corrupción, el ecocidio y el genocidio haciendo cumplir la tratados internacionales, la constitución y demás leyes. Se debe eliminar la afectacion ecológica y cultural en torno a su construcción.
Los gobiernos municipales deben defender su territorio y población impidiendo que se sigan con el incumplimiento de las leyes. Por otra parte deben negociar para que realmente la región se vea beneficiada logrando que la población local tenga acceso a buenos empleo y bien pagados en el aeropuerto. También deben exigirles a los empresarios que están detrás de las constructoras que hagan obras de beneficio en los municipios como universidades, carreteras, etc.
La terminación del aeropuerto en Texcoco permitirá desarrollar en la región Texcoco: comercio, transporte, telecomunicaciones y turismo.
El punto básico es aprovechar el aeropuerto para subirse a la economía de la información, pero sin hacer un lado la ecología, cultura y la felicidad de la región. Convertir el Acolhuacan en el corazón de las comunicaciones de la megalópolis.
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